El movimiento humano es una asombrosa orquesta de contracciones musculares controladas por el sistema nervioso central para crear acciones conjuntas para realizar tareas específicas. Las tareas motoras pueden ser tan simples como levantar un vaso de agua o tan dinámicas como un swing de golf explosivo.
Cuando observa todas las acciones musculares y articulares de las que es capaz el cuerpo, hay innumerables patrones de movimiento que pueden crearse. Para permitir que el cuerpo tenga una gran cantidad de posibilidades de movimiento, las 10 articulaciones principales (enumeradas a continuación) del sistema de movimiento humano (HMS) roles y responsabilidades específicos. Comenzando desde cero, las articulaciones son:
- Pie
- Tobillo
- Rodilla
- Cadera
- Espina lumbar
- Columna torácica
- Columna cervical
- Hombro
- Codo
- Muñeca
Al evaluar el HMS, estas articulaciones se pueden clasificar como articulaciones basadas en estabilidad o movilidad.
Movilidad: La capacidad de moverse con libertad y facilidad.
Estabilidad: La capacidad del cuerpo para mantener el equilibrio postural y apoyar las articulaciones durante el movimiento.
Cuando las articulaciones se examinan individualmente, cada articulación se puede clasificar según su responsabilidad principal. Por supuesto, cada articulación tendrá alguna superposición de funciones, pero cada una tiene una función principal. Las articulaciones de estabilidad son el pie, la rodilla, la columna lumbar, la columna cervical y el codo. Las articulaciones de movilidad son el tobillo, la cadera, la columna torácica, el hombro y la muñeca. Un patrón claro emerge en el sentido de que la cadena cinética es una serie de articulaciones apiladas una encima de la otra en un patrón alterno de estabilidad y luego movilidad. Esta secuencia crea la plataforma ideal para el movimiento humano dinámico.
Desafortunadamente, puede ocurrir una interrupción en este patrón, creando disfunciones del movimiento. Las causas más comunes de esta alteración del patrón alterno incluyen lesiones previas, sobrecarga crónica del patrón, desequilibrios musculares o desalineaciones óseas. Cuando ocurren problemas como este, pueden afectar el funcionamiento normal de la articulación. Si la disfunción es lo suficientemente grave, la articulación, o en muchos casos las articulaciones, comenzarán a perder la capacidad de mantener su función primaria de estabilidad o movilidad. Muy a menudo, las articulaciones que se basan en la estabilidad se vuelven más móviles y las articulaciones que se basan en la movilidad se vuelven más estables.
Cuando las articulaciones dentro de la cadena cinética pierden su función principal debido a la disfunción y cambian de función, el movimiento humano se ve comprometido y la posibilidad de lesiones aumenta significativamente. Profesionales del fitness que entienden cómo evaluar adecuadamente el movimiento humano, comprenden la función de cada articulación, crean programas que restauran o garantizan que el movimiento humano no se verá comprometido, tienen una enorme ventaja para ayudar a sus clientes a moverse mejor.